Introducción:

Probablemente nunca imaginamos que la pandemia del COVID-19 tendría un impacto tan grande en nuestras vidas y en la industria del baile. Los estudios de danza, las compañías, los festivales y hasta las funciones en vivo se han visto afectados por las restricciones de distanciamiento social. Pero la danza es una forma de arte resistente y adaptable, y los bailarines del mundo se han esforzado por encontrar maneras creativas de seguir bailando.

El impacto en la industria del baile:

Una de las áreas más afectadas por la pandemia ha sido la industria del baile. Los estudios de danza cerraron sus puertas, los festivales y las competencias se cancelaron, y las compañías de danza tuvieron que cancelar sus actuaciones en vivo. Muchos bailarines y profesores de danza vieron su trabajo reducido o eliminado por completo. Todo esto no sólo ha tenido un impacto económico, sino emocional también. Muchos bailarines han perdido la oportunidad de expresarse a través del baile, lo que puede ser especialmente difícil para aquellos que lo ven como una salida emocional importante.

Los cambios en la forma en que se enseña:

Con el cierre de los estudios de danza, la mayoría de los profesores se han visto obligados a trasladar sus clases a plataformas en línea. Aunque esto puede ser una solución temporal, muchos bailarines han expresado su descontento por la falta de interacción personal y la dificultad de recibir comentarios críticos el momento. Pero esto no ha impedido que los profesores y los bailarines traten de seguir adelante. Algunos han optado por realizar clases en parques, plazas o grandes espacios abiertos respetando el distanciamiento social.

La creatividad en cuarentena:

En este momento de incertidumbre e inestabilidad, muchos bailarines han encontrado formas creativas de seguir bailando y expresándose. Muchos han publicado rutinas de danza en línea, han creado desafíos de baile en las redes sociales o incluso han colaborado en proyectos de danza en línea. Los desafíos de baile se han vuelto muy populares en redes sociales como TikTok y Instagram, y han proporcionado una forma divertida y creativa para que la gente practique su habilidad de baile y comparta su pasión.

Creación de obras en pandemia:

Si bien el COVID-19 ha forzado la cancelación de muchos eventos de danza, ha habido algunas compañías que han perseverado en estos tiempos inciertos. Han encontrado la manera de seguir creando y preparando obras que se puedan presentar en línea. Por ejemplo, algunas compañías han rehecho las tradicionales presentaciones en vivo y han optado por presentaciones en el cine o en línea. Además, algunos festivales de danza han trasladado su programación en línea, en lugar de cancelar por completo.

Conclusion

La pandemia ha tenido un gran impacto en la industria del baile, pero los bailarines han encontrado formas creativas de seguir bailando y creando. Con decisiones audaces como tomar clases en grandes espacios abiertos, presentaciones en linea, mayores precauciones de seguridad y el uso de la tecnología, los bailarines y sus miembros se han adaptado y han superado los obstáculos. Como bailarines, recordemos siempre que nuestra pasión no se puede romper y debemos hacer todo lo posible por encontrar formas de luchar por nuestra pasión incluso en los tiempos más difíciles.